miércoles, 8 de agosto de 2012

De a poco

Ya cae la noche.

De a poco una tibia brisa
envuelve mi cuerpo.

De a poco me invade
el cada vez más frío silencio.

Solo escucho lo que
otrora fue un corazón rebosante de vida,
ahora en un frío y silente cuerpo.

De a poco mi alma se aleja,
ahogándose en un tétrico mar de sombras.

De a poco mi voz se ve acallada
en medio de temores y silencios
que gritan y anuncian mi final.

No hay comentarios:

Publicar un comentario